Seguridad inclusiva: El desafío del Mundial 2026 fuera de la cancha
El Mundial 2026, organizado por Canadá, Estados Unidos y México, no solo representa una oportunidad futbolística, sino que también plantea desafíos en términos de seguridad inclusiva. Estos incluyen la protección de los derechos humanos y la seguridad de mujeres y personas de la diversidad sexual en eventos masivos.
El enfoque de seguridad debe ser interseccional, integrando factores como el género, la orientación sexual y la raza. Es vital que las políticas aborden la prevención de la violencia de género y las barreras que enfrentan personas transgénero o no binarias. Una planificación coordinada entre los tres países anfitriones puede establecer un nuevo estándar de seguridad inclusiva.
Prevención y formación en seguridad
Para proteger a las comunidades vulnerables, será clave la capacitación especializada en diversidad y género para las fuerzas de seguridad. Los tres países anfitriones deben compartir mejores prácticas y establecer puntos de asistencia en los estadios para responder a situaciones de acoso o violencia.
Enfoque regional para una seguridad inclusiva
Si bien Canadá cuenta con un marco avanzado en materia de igualdad de género, México enfrenta retos como la violencia en estadios, mientras que Estados Unidos debe superar obstáculos legales que afectan a las personas transgénero en ciertas ciudades. La coordinación internacional será crucial para aplicar estándares de seguridad que respeten los derechos humanos en todas las sedes del Mundial 2026.